Vale, lo confieso, no sé irme de vacaciones. Hay demasiadas planeaciones para el just disfrute. Too much work just for despapaye. Pero creo que eso tiene que ver con que, en realidad, estoy acostumbrado al viaje, los cambios y con que el disfrute se puede encontrar en la vuelta de la esquina (sin tener que moverte de tu barrio). Las vacaciones también suelen llevar de la mano el temible turismo (se echa a temblar recordando sus años en hostelería en la Costa del Sol). El capitalismo nos ha vendido las vacaciones como el súmmum de nuestro año laboral -todo gira en torno al trabajo todo el rato- y nos educa poco en el disfrute cotidiano. No es ninguna novedad que abogo siempre por la abolición del trabajo. Más fiesta y más siesta. El derecho a la pereza (por favor). En realidad las vacaciones después de una ardua tarea son, como mínimo necesarias y, el ser viajero y turista, de vez en cuando no está mal. Me contradigo. Si yo en realidad de lo que estoy en contra es del sistema capitalista y voraz que nos obliga todo el rato a generar dinero y a consumir cosas. Al final me he liado pero solo quería decir que estoy acostumbrado a viajar pero no a ser turista ni a lo que la gente entiende como vacaciones. La vida es un viaje continuo en sí misma (frase fácil pero real). Vivan lxs viajerxs románticos del siglo XIX (la puntillita intelectual). Disfrutad de las vacaciones y no molestéis mucho a la gente en los sitios que visitéis.
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